El baile en el cine

Estas últimas semanas, hablamos mucho de la danza clásico y del ballet. Le puede gustar a algunos pero, a menudo, los más jóvenes no se sienten tan atraídos por estas formas tan clásicas y antiguas. Seamos sinceros, el teatro, hoy en día, es más un lugar de mayores que de jóvenes. Pero existen más medios que pueden dar ganas a uno de interesarse al baile: el cinema. En efecto, el baile está presente en el cine desde el nacimiento del séptimo arte en 1895. Incluso en la etapa del cine mudo, ya lo utilizaban los grandes directores.

Pero al igual que el cine en sí, el baile en la pantalla grande ha evolucionado con el tiempo. Al principio, se trataba de cine musical. Es un género cinematográfico americano que nació en 1927 con el cine sonoro. Se caracteriza por películas que contienen interrupciones para dar un breve receso por medio de un fragmento musical cantado o acompañados de una coreografía. Tuvo su apogeo durante los treinta, hasta finales de los setenta. Al principio, los directores tenían por único objetivo impresionar y estas interrupciones no tenían mucha conexión con el desarrollo narrativo. Pero luego sí concatenaban la historia. En esta categoría, entran películas como Cantando bajo la lluvia con la famosa escena de Gene Kelly, Grease (1978), Moulin Rouge (1928-2001), Mary Poppins (1964), New York New York (1977), Fama (1980), Flashdance (1983) para nombrar algunos de las más famosas. Si le interesa, encontrará aquí una página con una lista más completa de las películas pertenecientes a este género. Sin embargo, ya que la lista no es mía y que no he visto todas las películas, no aseguro ni que están todas, ni que todas las que figuran pertenecen a este género.

Busby Berkeley era un genio creando coreografías con un estilo visual casi geométrico, lo que lo convirtió en una figura del musical. Entre sus trabajos están La calle 42, (1933, La saga de Vampiresas (1933-1935) o Escuela de sirenas (1944).

Fred Astaire y Ginger Rogers también han contribuido mucho a que se ponga el baile de moda en el cine. Han hecho su primera aparición en Volando hacia Río (1933) y han sido la pareja inmortal del baile en el cine durante 9 películas.

En los sesenta, salimos del cabaret y del clásico con West Side Story (1961), que nos lleva a las calles sucias de Nueva York. A ritmo de música y danza se analizan problemas como la migración latina, la delincuencia juvenil y la marginalidad. En este periodo, el baile muestra un carácter más degradante.
A finales de los setenta, John Travolta impone el disco con su famosa película Fiebre del sábado noche, (1977).

Luego, evolucionó la cosa y empezamos a ver películas verdaderamente dedicadas al baile. Al principio, y lógicamente, se trataba de películas sobre el ballet como Billie Elliot (Quiero bailar), Cisne negro, o bailes de pareja como Bailamos, Dejate llevar, Dirty Dancing, etc. A continuación empezamos a ver películas mezclando ballet y danzas más modernas en Save the Last Dance (Pasión y baile), Step up Pero desde hace unos años, el hip-hop se hace cada vez más conocer gracias a filmes como Honey, Street Dancer, Steppin,... Es un baile que, al principio, no se veía nada más que en la calle y fue duro para que se le diera más importancia y mérito. Gracias al cine, quizás se acaben los prejuicios y le dará la gana a más de uno de empezar a bailar o quizás los mayores no lo verán tanto como un mundo de delincuencia y de droga o por lo menos, no sólo.

En mi opinión, las películas son una buena manera de aprender de un tema porque si uno no es adicto, siempre hay una historia de amor o algo que hace que no sólo van dirigidas a bailarines. Aquí tenéis una página con 100 películas sobre el baile por si no sabéis que películas ver. 

Y en fin, para acabar, os dejo aquí un montaje  video, a mi juicio muy bien hecho de algunas de las mejores películas de baile.